Era un episodio en que Muriel viaja por todo el mundo... hasta de eso me acuerdo. En esa época compartía el cuarto con mis hermanas, y esperaba a que todas se durmieran para poder tocarme. No lo hacía esperando algo, ya que no sabía qué era un orgasmo. Tampoco lo hacía pensando que era como tener sexo, porque tampoco pensaba en perder la virginidad. Es más: creo que ni siquiera había dado mi primer beso...
En fin, en esa época me tocaba todo el tiempo, de noche, de día, en el baño, en el cuarto... Me recostaba en los bordes de las silla... me ponía abajo del chorro de la ducha... me miraba en el espejo... y me metía los dedos, por supuesto... Y estando en clase era suficiente con cruzar las piernas para sentir placer...
Pero no lo hacía con un propósito... Así que me sorprendí mucho cuando tocándome suave y distraídamente empecé a sentir más y más y más placer... hasta llegar al orgasmo... Fue espectacular... y único, porque a partir de ese momento cuando me tocaba esperaba volver a sentir esa sensación, y era frustrante no llegar...
Con el tiempo lo fui perfeccionando y lograba orgasmos espectaculares (mientras escribo me estoy excitando...), pero ninguno como ese...
También me acordé del primer orgasmo que tuve con un hombre... y el primer orgasmo que tuve con una mujer... Me acordé también de la primera vez que tuve fingir un orgasmo estando con un hombre.... Con una mujer todavía no fue necesario...
Pero eso queda para otro día... ahora me voy a bañar y a jugar un poco con la ducha...
Saludos,
Loly L
